LA LISTA DE LOS REYES MAGOS
La carta de los Reyes Magos siempre lleva de cabeza a los padres. Son interminables las listas que escriben los niños a los Reyes Magos o a Papá Noel pidiéndoles toda clase de regalos que van desde los clásicos, como muñecas, coches o juegos de construcción, hasta los más modernos aparatos electrónicos de última generación: tablets , ipods, ipads y demás…
A pesar de que la Navidad es una época muy especial para los niños no debemos caer en el error de permitirles tener cualquier cosa. Los padres son responsables de los regalos de sus hijos y es importante que seleccionen en función de la edad , de las preferencias personales y de la necesidad.
Algunas de las consideraciones a tener en cuenta para hacer una buena compra son:
- Adecuados a su edad: Hasta los 3 años son ideales los juguetes que estimulen los sentidos, de los 3 a los 6 años se recomiendan aquellos que desarrollen la psicomotricidad fina (puzles, juegos ensartar, libros para colorear). De 6 a 10 años podemos decantarnos por bicicletas, juegos de mesa o libros. A partir de los 10 años entra en juego el mundo de los videojuegos.
- Evitar los juguetes sexistas, dejemos a los niños que elijan el juguete en función de sus preferencias y no de su sexo. ¿Por qué una niño no puede tener un Scalextric o un niño una muñeca? Si educamos en la libre elección estaremos educando en la tolerancia y el respeto hacia los demás.
- Juguetes que estimulen la cooperación y las relaciones con otros niños (evitar los juguetes bélicos): juegos de mesa, de palabras o de estrategias.
- Juegos que estimulen las capacidades mentales: juegos de memoria, de atención, de lenguaje. Existen infinidad de juegos educativos muy divertidos y que estimulan estas habilidades.
A pesar de las recomendaciones y los límites que muchos padres ponen en la compra de regalos. Es probable que familiares o amigos engrosen la lista de juguetes que recibirán los niños. Por eso, el Centro de Psicología Camins recomienda que los padres intervengan en el uso que hagan de ellos y el tiempo que le dediquen al juego.
Centro de Psicología Camins, Castellón